La fuente de agua potable moderna fue inventada y fabricada a principios de 1900 por dos hombres: Halsey Willard Taylor con la Halsey Taylor Company; y Luther Haws con la Haws Sanitary Drinking Faucet Co. Estas dos compañías cambiaron la forma en que se servía el agua en lugares públicos.
El padre de Taylor había muerto de fiebre tifoidea causada por agua potable pública contaminada. La muerte de su padre lo motivó a inventar la fuente de agua potable, para proporcionar agua potable más segura al público y, con suerte, prevenir la propagación de enfermedades como la fiebre tifoidea.
Haws era fontanero e inspector sanitario a tiempo parcial. Mientras inspeccionaba una escuela pública, Haws vio a niños bebiendo agua de una taza de lata común atada al grifo. Haws también temía que hubiera un peligro para la salud en la forma en que el público compartía su suministro de agua. Haws inventó el primer grifo diseñado para beber. Usó piezas de plomería de repuesto, sacando la bola de una cama de latón y una válvula de oreja de conejo de cierre automático. El departamento de la escuela de Berkeley instaló el primer modelo de grifos para beber.
Desde entonces, las fuentes de agua potable se han vuelto cada vez más populares, y la tecnología y la seguridad de ellas se han desarrollado en gran medida. Ahora son esenciales en lugares públicos como escuelas y centros de ocio, y el acceso al agua potable limpia y segura es estándar en el Reino Unido. Gracias al trabajo de estos hombres, cuyas empresas siguen fabricando excelentes fuentes de agua hoy en día, en Drinking Water Fountains podemos ofrecer una amplia gama de fuentes de agua potable elegantes y sanitarias adecuadas para cualquier espacio personal o público, asegurando que tenga agua potable limpia con solo tocar un botón.